Devolvimos el pollo
de KFC al imaginario colectivo.

Un proyecto de Brand Platforms que ha convertido una marca que había caído en el olvido en una Love Brand.

Año

2017

Cliente

KFC

Industria

QSR

Capabilities

Trends Research
Brand Strategy
Comms planning
PR Amplification
Product Design

Contexto

El gran reto de KFC era volver a poner la marca y su producto en el centro de la conversación, aumentar su notoriedad era clave para volver a ser relevantes en un mercado muy saturado con marcas que cuentan con presupuestos de comunicación mucho más elevados y mayor número de restaurantes.

Proceso.

La creación de la nueva plataforma estratégica de KFC partió con un análisis previo muy exhaustivo para conocer en profundidad la idiosincrasia de la marca en España, las particularidades del target, su comportamiento con respecto a las marcas del sector, y su relación con la categoría. Analizamos también las tendencias del mercado de comida rápida y las tendencias de hábitos de consumo.

Tras una serie de sesiones de trabajo con el equipo de KFC en las que se definieron las líneas estratégicas básicas y los nuevos territorios de comunicación, creamos un nuevo concepto, tono y un territorio que se extendía más allá de los canales convencionales de comunicación.

Insights.

Partimos de una verdad cultural: en España, cuando algo es bueno de verdad, se dice dos veces. Por eso en KFC no tenemos pollo, sino “Pollo Pollo”. Este concepto se tangibilizó en el nuevo claim “El Pollo Pollo se hace en Kentucky”.

Qué hicimos

Desarrollamos la plataforma de comunicación con la música como elemento diferencial, y capaz de vivir en diferentes medios: spots de marca y producto, campaña de exterior, comunicación en PDV y campaña de performance. Redefinimos la estrategia social y de contenido, buscando canalizar y aumentar la interacción con nuestras comunidades.

Así, desarrollamos un plan de presencia en eventos a través de influencers, y colaborando con creadores que desarrollaron sus propias versiones musicales del hit #PolloPollo. Activamos nuevas conversaciones en momentos puntuales como la matriculación de vehículos con las letras KFC; o diseñando un producto innovador como el Polo Polo, un polo confeccionado con un tejido inteligente a prueba de manchas.

Impacto

Construir un tono diferenciador nos ha permitido destacar y conectar con el target. Pero no solo eso, ser capaces de canalizar toda la repercusión en redes sociales a nuestro favor ha sentado las bases para convertir a KFC en una Love Brand.

Además, la campaña consiguió los niveles de notoriedad más altos para la marca desde 2010, niveles récord de interacción y engagement haciendo crecer la comunidad en redes de forma orgánica. Y lo más importante, aumentó las ventas durante el periodo de campaña en un 3,2%.